Su característica principal es que no requieren las ligaduras elásticas que los unen al alambre, que sí son necesarias en otros tipos de brackets. Al contrario, el diseño de los brackets autoligables incorpora una pestaña móvil que fija el alambre al bracket y reduce la fricción. Esto hace que el movimiento de las piezas dentales sea más rápido, facilita el trabajo del ortodoncista, y acorta las visitas de ajuste.

Además, la ausencia de gomas elásticas facilita su limpieza y mantenimiento, lo que hace que el tratamiento sea más cómodo y más rápido.

Los brackets autoligables son una novedosa técnica de ortodoncia que, con 20 años de antigüedad, han abierto el debate sobre los efectos de la fricción en la duración de los tratamientos de ortodoncia. Su principal novedad es un sistema de ligado diferente, visible en el diseño de los brackets.

Otros tipos de ortodoncia, como los que utilizan brackets metálicos o estéticos, cuentan con gomas elásticas que mantienen el arco sujeto a los brackets, guiando su movimiento. Sin embargo, ese movimiento se produce más lentamente debido a la fricción que la goma ejerce sobre el alambre.

La pestaña presente en cada bracket permite que el alambre quede fijo sin necesidad de utilizar las gomas, lo que facilita el movimiento del diente y lo hace menos doloroso.

Por otra parte, el diseño cuadrado de estos brackets y la fijación única hace que su higiene sea más sencilla, y que las sesiones de ajuste sean más rápidas, al no necesitar cambiar ligaduras.